Éstos son generados con biomasa de los productos agropecuarios, como caña y sorgo.

Pues a pesar de que el etanol tiene un precio de entre 11 y 13 pesos por litro, más de 3 pesos menos que la gasolina, éste no ha logrado afianzarse en el consumo.

Y es que la industria de biocombustibles no fue visualizada y planeada por el Gobierno federal para lograr una soberanía energética, “no estaba dentro de la estrategia del Gobierno mexicano, no se le consideró, a diferencia de muchos otros países, no sólo en América sino en Europa”, afirmó Arturo Sánchez, investigador del laboratorio de futuros en bioenergía del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Investra), unidad Guadalajara.

Destacó que en México existe una industria incipiente pues no se han establecido incentivos para desarrollarla, como la excepción de impuestos por usar biocombustibles u otorgar subsidios a los productores de la materia prima.

Doble pérdida

Y en la región se pierde por partida doble. Lorenzo Tapia Estrada, líder del sindicato de obreros en ingenio El Carmen, explica que en la zona hay una gran producción de la materia prima debido a la tradición cañera, pero ésta no ha podido ser explotada debido a la indiferencia de la sociedad.

Explicó que mientras otros ingenios producen etanol e incluso han innovado con generación de energía, en esta zona no ha sido posible debido a que los consumidores “tienen dudas” y desconfianza ante estas alternativas.Pero con el etanol se puede ahorrar hasta 20% de combustible.

Fuente: https://www.zafranet.com/2017/02/fracasaria-el-etanol-pese-a-gasolinazos/